Se había iniciado la llamada guerra fría (1945-1991) en
donde los EEUU y la URSS pugnaran por la defensa y expansión de sus sistemas
económicos y políticos: el capitalismo y el socialismo respectivamente. Las
potencias occidentales de Europa están devastadas por las secuelas de la
segunda guerra mundial. La política norteamericana en el marco de la guerra
fría será conformar un bloque firme de países europeos contra el avance del
socialismo y para ello deberá contribuir a reimpulsar sus economías golpeadas
por la guerra, así como hacer de Europa un gran mercado de consumo de los
productos norteamericanos. En función a ello el Secretario de Estado
norteamericano George Marshall, en junio de 1947, diseñará un plan de reconstrucción económica
para ser aplicada en Europa: el llamado Plan Marshall.
¿En qué consistió el Plan Marshall? ¿Qué
objetivos perseguía? El Plan Marshall o Programa de Reconstrucción Europea, fue
un programa económico de ayuda para la reconstrucción de Europa luego de la
segunda guerra mundial. Recordemos que potencias imperialistas como Inglaterra,
Alemania, Francia, etc.; quedaron en ruinas tras la guerra. Y de esto se
pretendía aprovechar EEUU. Este plan norteamericano buscó servir al reimpulso
del capitalismo en los principales países europeos y evitar el avance del
movimiento socialista en los países afectados por la guerra y neutralizar la
política del socialismo soviético. Fueron 16 los países europeos inscritos en
dicho plan quienes en la Conferencia de París acordaron ser parte de ello. El
plan Marshall fue aprobado por el congreso norteamericano y comenzó a enviar dinero
a Europa entre 1948 a 1952. Se desembolsaron cerca de 13 mil millones de
dólares en este plan que fueron otorgados a manera de créditos y donaciones. Los
principales países beneficiados fueron Gran Bretaña, Francia, Alemania Federal e Italia. Para la administración de dicho programa se creó en Europa
la OECE (Organización Europea de Cooperación Económica). La URSS y las democracias populares
de Europa del este no participaron de este programa por considerarlo un
condicionamiento económico con la clara intención de sujeción a los dictámenes
de la Casa Blanca. Con esta “ayuda económica” para Europa, el
imperialismo norteamericano se consolidó como la superpotencia hegemónica y
atrajo a su órbita a Europa occidental.
El plan Marshall fue una tenaza que
permitió a los EEUU convertir a los países de Europa occidental en dependientes
de esta superpotencia, fortalecer la llamada democracia que no es otra cosa que
la democracia burguesa y contener el avance de los comunistas en el viejo
continente. Su aplicación permitió la recuperación de las principales potencias
imperialistas de Europa y sentó las bases para la integración económica europea
convirtiéndose en una fuerte barrera contra el movimiento comunista dirigido
por la Unión Soviética.